Hoteles en Lisboa

La Torre de Belém de Lisboa se ubica junto al río Tajo. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad y su historia comienza en el siglo XVI. Al principio, la Torre de Belém fue usada como fortaleza para proteger una de las entradas de la ciudad, pasando a ser usada también como centro de recaudación de impuestos o como prisión.

También fue el punto de partida de algunas expediciones que partieron hacia India, Ásia, África y América.

En su arquitectura y ornamentación se puede apreciar la influencia del estilo árabe del arquitecto Francisco de Arruda, quien ejerció su profesión en Marruecos.

Uno de los principales rasgos de esta torre es su decoración exterior que está esculpida en piedra y en su estructura hay dos elementos que predominan: la Torre que consta de cinco pisos y el Baluarte.

El interior de la Torre de Belém es austero y cuenta con algunas escultura de San Vicente, el patrón de Lisboa.

El Monumento a los Descubrimientos se sitúa en el barrio de Belém, junto a la orilla del río Tajo y fue construido en el año 1960 para conmemorar los 500 años de la muerte de Enrique El Navegante.

El monumento cuenta con unos 50 metros de altura y en él están representadas importantes figuras de la era de los descubrimientos que miran hacia el río.

En el suelo junto al monumento se encuentra un gran mapa con el dibujo de la rosa de los vientos. El Monumento a los Descubrimientos cuenta también con una pequeña exhibición multimedia y subiendo al último piso se pueden observar una bonitas vistas del río y del barrio de Belém.

El Castillo de San Jorge es uno de los monumentos más conocidos e imponentes de Lisboa y está situado en la cima de la Colina de San Jorge.

Se trata de un castillo cuya construcción se remonta al siglo V, siendo más adelante agrandado por los árabes en el siglo IX y que sufrió una restauración completa en el año 1938. Durante los siglos XIII y XVI fue ocupado por los Reyes de Portugal.

El Castillo de San Jorge cuenta en la actualidad con 11 torres, fosos , patios y garitas. La visita además se extiende por un pequeño museo y para terminar también cuenta con un bar y un restaurante.

Desde cualquier ángulo de este castillo se puede disfrutar de unas vistas espectaculares de la ciudad.

Este castillo cuenta además con un Núcleo Museológico que merece la pena visitar en el que gracias a los distintos elementos que contiene se pueden conocer más datos sobre la ocupación islámica de la ciudad y los objetos cotidianos de los habitantes de aquella época.

Otra zona importante que se encuentra junto al Castillo de San Jorge es el Núcleo Arqueológico donde se pueden visitar algunos restos arqueológicos de la historia de Portugal, diferenciados en tres periodos principalmente:

- las primeras ocupaciones del siglo VII a.C. ,

- las ruinas de la zona islámica y la época de la construcción del castillo

- la destrucción del castillo a causa del terremoto de 1755

El Elevador de Santa Justa te permite disfrutar de uno de los paisajes más bonitos de Lisboa. Se encuentra situado entre Baixa y Chiado y su fue creado para solucionar el desnivel entre ambas zonas.

La inauguración oficial del Elevador de Santa Justa fue en Julio de 1902 y cuenta con una estructura de hierro que se inspira en construcciones de grandes dimensiones como por ejemplo La Torre Eiffel.

Una vez en su interior, se encuentran dos ascensores que elevan a los viajeros hasta la terraza donde además podrán disfrutar de una cafetería. Al salir del elevador en la zona de Chiado se puede disfrutar de la Praça do Carmo donde también se hallan las ruinas del antiguo Convento do Carmo.

La Plaza del Comercio de Lisboa es la más importante de la ciudad de Lisboa. Está situada en la Baixa Pombalina.

En su origen estuvo ubicado el Palacio Real que fue totalmente derruido en el terremoto del año 1.755. A posteriori, se reconstruyó la plaza de la mano del Marqués de Pombal.

La Plaza del Comercio cuenta con tres edificios porticados y uno de sus lados está abierto al río Tajo.

En este espacio podemos encontrar dos puntos de interés principales:

- el Arco Triunfal da Rua Augusta que fue creado para celebrar la reconstrucción de la ciudad después del gran terremoto.

- la Estatua Ecuestre de José I en honor del rey portugués que estuvo al mando durante el terremoto de Lisboa.

Durante todos sus años de historia, esta plaza ha sido testigo de numerosos acontecimientos históricos como fue la Revolución del 25 de Abril. Hoy en día también es un lugar señalado donde se llevan a cabo manifestaciones y protestas.

El Arco de la Rua Augusta nos permite el acceso a la Plaza del Comercio. La construcción de este arco se remonta al año 1755, ya que se creó como símbolo de la reconstrucción de la ciudad después del devastador terremoto. Actualmente, se trata de uno de los monumentos más recientes de la ciudad de Lisboa, ya que fue nuevamente inaugurado en el año 2003 tras una gran rehabilitación.

El Arco de la Rua Augusta cuenta en su parte superior de un mirador que le ofrece al visitante unas espectaculares vistas de la Plaza del Comercio y de todos los monumentos cercanos a ésta. Dentro del propio mirador se encuentra una exposición donde se muestra la historia de la construcción de este arco.

Uno de los lugares con más encanto de la ciudad de Lisboa son sus miradores. En especial, el Mirador de Santa Lucía, situado en el barrio de Alfama y con el río Tajo de frente.

El Mirador de Santa Lucía ofrece un agradable espacio al visitante que cuenta con bancos de piedra y una cubierta decorada con buganvillas, lo que crea un espacio inmejorable, donde a menudo se puede disfrutar de la presencia de pintores o músicos que acompañan la visita con música en vivo.

En los azulejos que decoran este mirador se pueden ver escenas representativas del Terremoto de 1755 y del ataque cristiano que tuvo lugar en el Castillo de San Jorge.

Desde el mirador además se puede observar las preciosas vistas de las torres de la Iglesia de San Miguel y la Iglesia de San Esteban, la cúpula del Panteón Nacional y las blancas casas del barrio de Alfama.

Junto a este mirador se encuentra la Iglesia de Santa Lucía.

El Panteón Nacional de Lisboa está situado cerca del barrio de Alfama. La construcción de este Panteón comenzó a finales del siglo XVII y concluyó en el año 1966. En sus orígenes había una iglesia de la que hoy en día apenas se conserva nada.

En el Panteón Nacional de Lisboa se encuentran los restos de importantes personas para el país como Amália Rodrigues o los presidentes de Portugal.

Lo más imponente del panteón es su gran cúpula blanca en el exterior y revestida de mármol policromado en el interior. Además también cuenta con una terraza en la parte superior del panteón donde se podrá disfrutar de unas maravillosas vistas.

El Monasterio de los Jerónimos se ubica en Lisboa, más concretamente en el barrio de Belén y constituye una de las visitas más importantes de Lisboa.

Éste monasterio fue construido con motivo de la conmemoración del regreso de la India de Vasco de Gama y declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1983.

El edifico toma su nombre de los monjes de la Orden de San Jerónimo, que lo habitaron durante los primeros años.

Se trata de una gran construcción que cuenta con una amplia fachada (más de 300 metros de longitud) diseñada por el arquitecto Diogo de Boitaca y que concluyó a finales del siglo XVI.

En su interior alberga un hermoso claustro y una iglesia. El claustro del Monasterio de los Jerónimos cuenta con un patio central donde se encuentran las tumbas de Vasco de Gama y el poeta Luis de Camoes. Además se dispone de una sala-museo donde se puede apreciar la evolución del monasterio y la historia de Portugal.

La iglesia por su parte consta de una sóla nave y en su portada lateral se puede apreciar la figura de Nuestra Señora de Belém y varias escenas de la vida de San Jerónimo.